Es ya un mito el famoso cuadro. Más de algún amigo o familiar, o quizás en nuestras propias casas se podía encontrar este retrato. Decían que era satánico, que puesto en alguna posición mostraba al niño siendo devorado por un mosntruo...o que se podía ver el diablo...Una vez con vecinos, nos juntamos en la casa de uno de ellos, de noche. Pusimos el cuadro al revés iluminado sólo por velas, y esperabamos ver imagenes que asustaran. No me acuerdo qué vimos, pero salimos corriendo, y más de alguno lloraba.
La historia del cuadro, nos habla del autor, un pintor español de poca fama, que habría hecho un pacto con el diablo para lograr la fama en su arte.
Bruno Amadio (Bragolin), nacido en Sevilla retrató muchos niños llorando, pero fue este cuadro el que, desde los años cincuenta, ha sido asociado a la mala suerte, incendios y tragedias en los lugares en donde se colgaba, quedando intacto en los numerosos siniestros en que todo fue quemado. Hasta en la actualidad podemos ver en foros de Internet, reportes de rachas de mala suerte luego de haber recibido este cuadro de regalo. Desastres económicos, conflictos familiares, incendios, muertes...todo sería obra del la negatividad asociada al cuadro. Este niño existió, vivió en un orfanato, hasta perder la vida poco tiempo despúes en un grave incendio.
Para deshacerse del cuadro, se recomienda enterrarlo o quemarlo. Ojalá no les llegue de regalo de navidad, o aparezca misteriosamente en alguna bodega.....Feliz Navidad.. MUAHAHUAUHAAHAUAUAAAA...
