martes, 4 de agosto de 2009

La mentira.

La mentira.

Desde que tengo conciencia que vengo escuchando que la mentira es mala. Que la mentira aquí, la mentira allá, y bla bla bla… Pero hay referencias buenas sobre la mentira en famosos textos, como por ejemplo la frase: “que no sepa tu mano lo que hace la otra”. ¿Porqué esconderle la verdad a la otra mano? ¡Tengo toda la impresión de que mentir no es tan malo! ¿Cuánto duraría una relación de pareja sin la mentira? ¿Cuántos negocios fracasarían sin la mentira? ¿Cuántas veces dijiste “mucho gusto” a alguien que, en realidad, te desagradaba saludar? La mentira es una mentira, por piadosa que sea, pero insisto, no es mala…además, es el único sustituto de la verdad que se conoce hasta el momento. ¿Nunca te comiste un trozo de carne horriblemente duro, estando de visita, y cuando te han preguntado cómo estaba, dijiste?: “¡Está rico tía, me salió blandita!”. El más mentiroso del mundo es aquel que dice que no miente. Nos mentimos a nosotros mismos, por sanidad mental, nos mentimos para entretenernos, para pasar mejor la vida, nos mentimos porque la sociedad es mentirosa y eso lo internalizamos durante la socioculturización.

Mentir es un arte, una actividad que pretende engañar u ocultar algo a otro, pero engañándonos, a la vez, a nosotros mismos, manipulando nuestros gestos, haciéndonos los tontos con lo que sentimos. Diferente es el caso del mentiroso patológico, que llega a creerse sus mentiras, pero creo que todos tenemos algo de eso… ¿O a nadie le pasó que, de tanto creer que fue a aquella memorable fiesta, al pasar los años, finalmente duda si realmente asistió o no? La mentira es necesaria, es sana, pero como todo en exceso es malo, hay que cuidar su uso. Hasta los supuestamente menos mentirosos mienten. Miente la monjita que reprime su deseo sexual, miente aquel que quiere “ayudar a los demás” (negando que en realidad lo hace por lo “bueno” y bien que se siente al ayudar), miente todo aquel que dice “siempre” y “nunca”.

Si te miento para hacerte sentir bella y contenta, ¿está mal?

Si miento para evitarte una pena, ¿está mal?

Si me miento (y me la creo) para pensar que te he olvidado, ¿está mal?

Las mentiras no dañan a las personas…es el juicio que uno mismo hace sobre la mentira lo que a uno lo daña, es el cómo me siento con la mentira del otro, y eso amigos, no es responsabilidad del otro.

Dije que el más mentiroso del mundo era aquel que decía que no miente. Pero es mentira, ¡les mentí!, el más mentiroso es el que dice que la mentira es mala (y más encima la usa), y además, aparte de ser tan mentiroso, eso (si fuera cierto) lo convertiría el un animal; sólo los humanos pueden mentir.