lunes, 5 de noviembre de 2007

¿Quién soy?

Con el título de este artículo, no me refiero a el nombre y Rut que me tocó por nacer en este país (¿o tal vez debiera decir, el país que elegí para nacer?), si no que a un antiguo refrán o provervio que dice que los demás son "espejos" de nosotros. En los demás nos conocemos, y a la vez, en los demás estamos. No tenemos otra manera de concebir la (realidad) que desde nosotros mismos...y es IMPOSIBLE percibirlo de otro modo, pues somos la máquina que está percibiendo. Somos juez y parte, y en todo nuestro quehacer, está nuestra cultura, nuestra sociedad y nuestra familia. La tradición científica aun predominante nos enseña que hay un mundo "afuera" común, al que accedemos o conocemos desde nosotros. Es como una especie de fotografía. Lo cierto, es que aquella ilusión es la "realidad" y la "objetividad" para la gran mayoría de los habitantes del planeta. Los desarrolos en mecánica y física cuántica dan cuenta de otra realidad, una realidad casi mágica, mas fascinante que la ficción misma, y habla de la consciencia influyendo "científica y mediblemente" sobre la materia. Estos descubrimientos datan de comienzos del siglo pasado... y los posteriores desubrimientos, no han hecho más que fascinar y desconcertar a los investigadores. La concepción de espacio-tiempo, campos mórficos, túneles de gusano en el espacio, meditación, magia, etc. Al final, el objeto de estudio es el mismo; EL HOMBRE. Volviendo a mi pregunta incial, sobre "¿quién soy?", hice un pequeño expermiento. Dentro de mi lista de contactos de MSN elegí tres personas y les dije lo mismo(eran mujeres) : "Hola Mierda!". La primera me responde: "que te pasa, desubicado", la segunda me dice "Hola , ya andas loco?", y la última agrega "jajaja, hola mierda, payaso". Entonces...¿qué soy?, un desubicado, un loco, o un payaso?, a todas le dije lo mismo, y ante el mismo estímulo resulté ser tres personajes diferente...y repito, ¡diciendo lo mismo!. Así, es como podemos darnos cuenta que la gente "no es", sino que "la percibimos como", y en ese percibir estamos metidos hasta las patas...con nuestra cultura, nuestra familia y nuestra sociedad. Cuando vemos o percibimos cosas, estamos incluyéndonos de manera inseparable. "Yo no te hago sufrir, tu sufres (o eliges sufrir) con aquello que hice". Yo no puedo meterme dentro te tu sistema nervioso y en tu cerebro y provocar descargas de adrenalina y neurotransmisores varios, eso lo haces tú mismo. Ahora bien...como ejercicio, podemos detenernos en nuestras percepciones de los demás y analizar qué cosas NUESTRAS son las que nos hacen ver como vemos a los demás, y qué podemos hacer para mejorar y hacer más positivas esas percepciones...

4 comentarios:

Anónimo dijo...

Buen artículo, comparto algunas ideas...Siempre he dicho uno no sufre, ama, se enerva, etc por culpa de X, uno sufre porque QUIERE sufrir, porque nos permitimos que algunas personas o situaciones nos afecten. Sobre el QUIEN SOY, yo lo tengo más que claro, y puede ocurrir que existan personas que me perciben de una forma totalmente diferente, y está bien, es respetable, quien sabe, quizás hay cosas que no vemos hasta que alguien más las descubre por nosotros. Pero NO creo q como yo percibo al resto es como SOY realmente, es un poco inseguro verte reflejado en otros.
Mi humilde opinión

El Patagón dijo...

Me hiciste caso, te dije que era buena esa droga...

fuera de talla, buen artículo :)

Anónimo dijo...

Excelente artículo. Da para pensar y cuestionarse...Abramos los ojos.

Anónimo dijo...

O sea, cada compadre piensa lo que quiera, del otro. Y el otro de seguro que hace la misma weá.

Raya pa la suma: piensa lo querái de mí, que yo eligiré qué me gusta más. O qué me conviene más. Y lo que piense yo de ti, que no te importe nada. Total... ¿te hai fijao que siempre encuentro a todos cagaos de la piña, y que el único perfecto soy yo?

Shau.